Ante la cruda realidad de la pérdida de biodiversidad, la preservación de la diversidad genética de nuestro planeta es más crucial que nunca. La criopreservación se perfila como una tecnología fundamental en nuestros esfuerzos por salvaguardar el material genético de las especies en peligro de extinción. 🌍
Para proteger la biodiversidad del planeta, animales en peligro de extinción, como el jaguar y el rinoceronte negro oriental, almacenan sus células reproductivas en importantes biobancos como Nature's SAFE, uno de los mayores biobancos de tejido vivo de Europa. Esta iniciativa representa una pieza clave en el rompecabezas de la conservación, ya que utiliza tecnologías de vanguardia para congelar criogénicamente pequeñas muestras de tejido de ovarios y testículos de animales fallecidos en el Zoológico de Chester, Inglaterra. Al congelar estas muestras a -196 °C en nitrógeno líquido, se detienen todos los procesos químicos naturales de las células, deteniendo así el tiempo. Estas muestras congeladas tienen el potencial de resucitar especies que, de otro modo, podrían perderse para siempre.
La Dra. Sue Walker, jefa de ciencias del Zoológico de Chester y cofundadora de Nature's SAFE, subraya la importancia de esta labor. Con la disminución del acervo genético y la disminución de las poblaciones de animales salvajes, el papel de los zoológicos de conservación modernos nunca ha sido tan vital. Según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), más de 40.000 especies se encuentran actualmente en peligro de extinción, lo que pone de relieve la urgencia de nuestra crisis de biodiversidad.
La criopreservación implica diversos métodos para asegurar distintos tipos de muestras biológicas. Por ejemplo, los espermatozoides pueden extraerse tras la castración y almacenarse en un anticongelante rico en nutrientes y compatible con las células antes de colocarse en recipientes con nitrógeno líquido. Estos espermatozoides pueden descongelarse posteriormente y utilizarse para fecundar óvulos congelados, y el embrión resultante se implanta en una madre sustituta.
Además del esperma, el tejido ovárico y testicular se conserva indefinidamente en el biobanco. Los científicos están explorando maneras de cultivar estos tejidos para producir óvulos y espermatozoides para futuros programas de reproducción. Incluso las células de la piel pueden reprogramarse para convertirse en células madre pluripotentes, capaces de transformarse en cualquier célula del cuerpo, incluyendo espermatozoides y óvulos. Este enfoque pionero significa que una biopsia de piel de la oreja de un rinoceronte negro oriental podría ser crucial para salvar a la especie.
Si bien es necesario reforzar y aumentar las formas tradicionales de proteger las poblaciones de vida silvestre, es inspirador y esperanzador ver que los avances tecnológicos en el campo de la criogenia ofrecen una solución alternativa para asegurar opciones futuras para mantener la biodiversidad en nuestro planeta.
Como líder en el campo de la criogenia, en Consarctic mantenemos nuestro compromiso con el avance de la tecnología de criopreservación y con la contribución a los esfuerzos globales de conservación. Al aprovechar el potencial de la criopreservación, podemos garantizar la supervivencia de las especies más vulnerables de nuestro planeta y preservar la riqueza de la biodiversidad de la Tierra para las generaciones futuras.